Hoy vamos a hablar sobre los beneficios del vinagre de manzana no pasteurizado y el zumo de limón para nuestro hígado. El elemento clave en el vinagre de sidra de manzana es el ácido acético, que ayuda a suprimir el almacenamiento de grasa. Asegúrese de obtener vinagre de sidra de manzana orgánico. Beneficios para la salud del vinagre de sidra de manzana no pasteurizado : • Ácido acético (suprime el almacenamiento de grasa) • Mejora la sensibilidad a la insulina • Estabiliza el azúcar en la sangre • Reduce la grasa en el hígado • Acelera la digestión • Aumentar la liberación de bilis del hígado • Ayuda al páncreas a liberar enzimas Para mis amigos de Venezuela y otras partes que no consiguen vinagre no pasteurizado, les recomiendo meter media manzana troceada con piel dentro de 1 litro de vinagre de manzana pasteurizado, de esta manera lo revitalizamos, le aportamos bacterias beneficiosas, enzimas etc. Usar limones crudos puede ser la mejor opción. Si usa jugo de limón de una ...
La autoestima es muy importante y es algo que podemos fortalecer, la mejor etapa es la infancia.
En este libro Paola Santagostino, psicóloga y psicoterapeuta, es autora de numerosos artículos y escritos sobre trastornos psicosomáticos. De una forma específica se ha interesado por el estudio de los cuentos, sea como forma de terapia, como herramienta de conocimiento y evolución personal, o como técnica para solucionar problemas en las empresas. Colabora con la revista Tuto como experta en problemas de la adolescencia.
La falta de autoestima de su niño puede ser causa de trastornos de la personalidad en la vida adulta: drogadicción, dificultades emocionales, problemas de relación... Existen muchas formas de reforzar la confianza del niño en sus propias capacidades a partir de las vivencias de cada día. Un niño seguro de sí mismo se convertirá más tarde en un adulto sereno y equilibrado. El ingrediente principal de la seguridad es confiar en uno mismo: en las propias emociones, en los propios deseos, en las propias habilidades y aptitudes. Pero, ¿cómo podemos reconciliar el anhelo de libertad del niño con la natural preocupación de los padres? ¿Cómo protegerlo sin agobiarlo? A partir de situaciones reales y experiencias de la vida cotidiana, en las que resulta muy fácil reconocerse. Paola Santagostino explica cómo:
* Dirigirse al niño utilizando las palabras adecuadas y el tono correcto
* Enfocar su atención hacia todo lo que pueda estimular su fantasía
* Transmitir al niño una actitud positiva
* Establecer con el niño un diálogo abierto sobre sus emociones
* Proponer reglas precisas que puedan ser respetadas fácilmente
* Acostumbrarlo al trato con los demás
* Reconocer con él los errores y buscar las soluciones
* Aprender a valorar la gravedad de los problemas sin dramatizarlos.